Estimados colegas del pedal. Os presento una disciplina no comentada todavía en este foro ciclista y que a nuestro parecer es interesante, a la vez muy plástica y sugerente. No por ello exenta de esfuerzo y aventura, en la línea que nos movemos, y apta para todos aquellos que sienten la montaña, la aventura, el fervor primigenio de los conquistadores románticos de los tiempos de Lucen Briet.
Desde que éramos niños tuvimos vinculación con la montaña, crecimos y vivimos junto a ella. No es de extrañar así pues que sea parte de nuestra vida y de nuestras emociones. Sentimientos encontrados algunas veces entre la satisfacción y el odio ancestral que nos frustra cuando perdemos, ya sean amigos, ya sea cualquier otra cosa, como una oportunidad en la que debemos retroceder para evitar un mal mayor. Siempre presente en nuestros corazones y ahora en este espacio virtual deseamos fervientemente que os guste este nuevo reportaje, anticipo de unos cuantos más si es de vuestro agrado. Un saludo, Alberto.
Ascensión, por la Sierra Negra.
Por José Luis Bella (Mzungu)
Primera ciclo-montañera del año, en plena ola de calor, con 40º a la sombra y el asfalto a punto de ebullición huimos del valle en busca de aire fresco, verde, agua y horizontes despejados para adentrarnos en nuestras queridas montañas, en pleno corazón de los Pirineos.
Rodeados de los dos macizos más altos de la cordillera Aneto-Maladeta y Posets, se encuentra la Sierra Negra, un mundo mineral de pizarras negras y ferruginosas, que nos trasladan a paisajes casi volcánicos, casi de otro planeta; otro mundo de fuertes contrastes de color donde nuestra imaginación vagabundea libremente, mientras cargamos con nuestras bicis sobre los hombros hasta ganar el lomo de la cresta.
Al fin, poder cabalgar sobre nuestras maquinas por el enorme cordal de la sierra alcanzando los 2.700 y pico metros de altitud rodeados de un paisaje infinito es una experiencia única, surfear sobre el manto de pizarras sin camino, -cada uno elige su trazada-, nos hacer sentir libres aunque sea por unos instantes.
Integrados entre semejante inmensidad la vida se hace fácil ahora, elegir el camino, controlar los frenos, fluir… Más tarde nos internamos en el bosque frondoso, surcado por una senda revirada y con buena inclinación, es la guinda del pastel y así saboreamos cada metro de los 1.400m. de desnivel negativo que nos conducen hasta Benasque, simplemente BRUTAL. .
Gracias Rober (Jabalí) por el trak y Lagarto por ponernos en canción.
Un abrizo mu fuerte kiollls.