El final del verano…llegó.
Parte del final del verano… y que dure por los menos hasta San Miguel. Jejeje.
Un final bastante movido.
En esta entrega mensual cerramos capítulo del verano con una ingente cantidad de emociones que se agolpan al recuerdo, a borbotones, surgiendo del cerebro hasta el periférico del ordenador para que llegue de esta forma hasta todos vosotros. En un lugar bastante cercano todavía, que no consigues arrinconar, porque es la sal de la vida, tu pila de energía de estos fines de semana en los que todavía se puede salir al monte con ropa de corto.
El patio de juegos abarca mucho territorio. Está comprendido entre Ordesa, Alto del Cebollar, por las tierras de Biescas, el Prepirineo en las inmediaciones del Pantano de La Peña, Sierra de Loarre, y la alta montaña, además del complemento de la carretera (que no puedo dejar porque hay que ser multidisciplinar si queremos estar fuertes de verdad). Todo ello en la compañía del Biker de atributos más bajos del Reyno y de los colegas más enlulerdos y aberronchos del Valle del Zierzo.
Han sido momentos que no los cambiaremos por ningún otro tumbado en nuestro sillón. Aquí se encuentra la verdadera vida, el flow, el sentimiento como decía Mihaly Csikszentmihalyi, el estudioso número 1 del concepto de estado de flujo, o “flow”. El húngaro afirmaba que el estado mental en el que estábamos inmersos, absorbidos por la actividad con toda nuestra energía nos llevaba incluso a perder la noción del tiempo. El equilibrio, la felicidad es fluir en las actividades que hacemos, no en el postureo ni en la máquina sino en nuestra cabeza. Cómo nos sentimos realmente. Así me encuentro a fecha de hoy después de miles de metros de desnivel consumido durante estos días a lomos de la bici.
El Cebollar es una ruta que aparece en la página web de ZONA ZERO, elaborada por la gente de Ainsa y que os satisfará plenamente en todos los sentidos. La única cuestión que debe destacarse es que aunque sus 900 mtros continuados de subida por pista en perfecto estado parece que la hagan asequible, se puede combinar con la subida por el sendero desde el mismo pueblo de Torla con lo cual disfrutamos un poco más de los senderos de la zona. Ahora bien, acabada la subida ya podéis ataros los machos porque la diversión no tiene fin. Partiendo desde el sendero inicial sobre canchales y piedra hacia el descenso por planos inclinados de angulación camerunesa a la entrada del bosque para tornarse sinuoso y divertido paso entre pinos y hayas, en frenadas complicadas sobre escalones y raíces. Incluso la parte final “Guara Style” de empedrado sobre rocas como la cabeza de un taustano harán las delicias de los más aguerridos. Un final feliz en el camping, adornado con una jarrica de cerveza, es el mejor argumento para repetir a cualquier hora.
Tampoco conviene desconocer los privilegiados lugares que esconde el Prepirineo. Sitios tan paradisíacos como la Sierra de Loarre son cita ineludible de endureros de primer orden para el disfrute a muerte de sus suspensiones y demás parafernalia betetera. La subida por la Sierra, entre bosque de pinos, panoramas alucinantes como el Castillo de Loarre o la bajada por el tramo de sendero desde Os Puzos hasta Rasal son ingredientes muy apreciados para el disfrute mañanero. Rutas de alto nivel de esfuerzo y técnica aptas para cualquier descerebrao con ganas de marcha. Eso sí a casa bien manso para que haya paz durante un buen rato. Es lo que tiene el poder subir 1500 de desnivel para poder hacer una bajada digna de una prueba del campeonato de enduro de cualquier nivel.
Podéis buscar referencias en wikiloc sobre la zona porque he visto que existen varias personas que escriben y suben rutas de todos los niveles técnicos y de esfuerzo.
La Tierra de Biescas poco comentario necesita puesto que últimamente el pueblo de Gavín y los promotores de la zona, muy vinculados con este deporte, han puesto en valor con el fin de promocionar un entorno espectacular y privilegiado. Sus bosques, su relieve, su amor a esta disciplina han conformado un lugar de encuentro en el que incluso celebrar pruebas competitivas de gran nivel. Aquí nos encontramos la meca del enduro en estado puro. No podemos dejar pasar la oportunidad de consumir todas las rutas del Alto Gállego en función de nuestro nivel. Nosotros nos inclinamos por las competitivas y más desarrolladas por la gente de Biescas y Gavín, pero cada uno puede adaptar su nivel de exigencia y su estilo de conducción a la oferta promovida. Qué voy a contar que no os imaginéis. Había piedras para dar y vender, desnivel hasta decir basta, se rifaban las órdigas por todos los lados y los senderos de las pruebas del nacional daban para disfrutar hasta probar el polvo del suelo. Una auténtica maravilla.
http://www.bttpirineosaltogallego.com/es/vive-la-aventura.aspx
Ahora que ha pasado un poco de tiempo y que los recuerdos se asientan mejor queda el poso del flow y las heridas de los revolcones que cada día tardan más en curar. Pero escribir otra vez lo que se ha sentido y recordar algunas sensaciones fuertes como el sabor a hiel el la boca después de una subida a fuego de mil metros de desnivel positivo y llegar al punto clave de bajada, vestirte con las protecciones y echar la vista abajo….es increíble. Levantarte del suelo sin sufrir graves daños, pasarte la lengua por los labios con sabor a polvo después de dar más vueltas que un pirulo, por el suelo, agarrándote a los bojes y aliagas para no caer al vacío o ver que tu colega va a por ti para rescatarte después de un tollinazo no tiene precio. Y luego como siempre el final. A tomar unas cervezas y comentar la jugada. Exagerando +1000 para variar. Pero en eso consiste.
Lo dicho. Disfrutar mucho ahora que estamos vivos.
Nos vemos en el monte, little Canal sparrows.
Un abrizo de LAGARTIJA. Gracias a los colegas del Enduro por Zaragoza y de As Cimas, asi como al resto de cicloalpinistas recalcitrantes.